¡El mundo es ruidoso! Muchos sonidos son seguros, pero otros pueden dañar tu audición. Este tipo de daño se llama pérdida de audición inducida por ruido. Puedes perder parte de tu audición debido a los sonidos fuertes que escuchas en el hogar, la escuela y casi en cualquier otro lugar. La pérdida de audición causada por el ruido puede comenzar a cualquier edad. El daño puede acumularse con el tiempo. Una vez que pierdes tu audición, aunque sea en parte, ya no puedes volver a recuperarla.

Los sonidos pueden causar daño cuando son fuertes y duran un tiempo. Por ejemplo, la música que se reproduce a través de tus auriculares, los eventos deportivos y los conciertos, pueden ser lo suficientemente fuerte como para dañar tu audición en tan solo unos minutos.

Los sonidos también pueden causar daño cuando son extremadamente fuertes aun cuando duran poco tiempo, como los fuegos artificiales, un avión que está despegando o un disparo. Mientras más fuerte sea el sonido, más rápido puede dañar tu audición.

Hay buenas noticias: ¡puedes prevenir la pérdida de audición inducida por el ruido!

¿Cómo daña el ruido tu audición?

Las células dentro del oído que responden al sonido se llaman células ciliadas. Encima de cada célula ciliada hay un pequeño paquete de estereocilios, que se mueve de un lado a otro con las vibraciones del sonido. Con el tiempo, los sonidos demasiado altos pueden dañar estos paquetes de células ciliadas. Cuando eso sucede, las células ciliadas no pueden enviar información sobre los sonidos al cerebro. En los seres humanos, los paquetes de células ciliadas no se pueden reparar o reemplazar, por lo que este daño lleva a una pérdida permanente de la audición.

Imagen microscópica de un paquete de células ciliadas saludable.

Este pequeño paquete de estereocilios se encuentra encima de una de las células ciliadas del oído. El paquete de células ciliadas se mueve de un lado al otro con las vibraciones del sonido.

Imagen microscópica de un paquete de células ciliadas dañado.

Los ruidos fuertes pueden dañar el paquete de células ciliadas, haciendo que la célula ciliada no pueda responder a los sonidos.

¿Cuándo el sonido es demasiado alto?

El sonido se mide en unidades llamadas decibelios (dB), así como la estatura se mide en pies o pulgadas. Ya que las personas no pueden escuchar todas las frecuencias o tonos de sonido, a menudo usamos decibelios ponderados A (dBA) para describir la intensidad del sonido basado en lo que los oídos humanos realmente pueden escuchar.

Los sonidos de 85 dBA o más pueden dañar tu audición, dependiendo de cuánto duren. Cuanto más alto sea el sonido, más rápido se dañará. Por ejemplo, los cines pueden ser muy ruidosos, con un nivel de hasta 104 dBA. Cuando los sonidos son tan fuertes, ¡podrías poner en riesgo tu audición en menos de 14 minutos!

Tipos de protectores de oídos

Cuando no puedes bajar el volumen o alejarte lo suficiente de los sonidos fuertes, puedes usar protectores de oídos para mantener tu audición saludable. El mejor tipo de protectores de oídos es el que te gusta y que usarás.

Un adolescente usando orejeras para proteger la audición.

Un niño con orejeras con protección auditiva

La mayoría de las personas usa tapones para los oídos, que se ponen dentro del oído, u orejeras con protección auditiva, que se ponen sobre los oídos. Puedes comprar tapones para los oídos u orejas con protección auditiva en tiendas o en línea. Los protectores de oídos pueden ser económicos, como los tapones de espuma, o pueden costar más, como las orejeras o los tapones para los oídos a tu medida.

Los ruidos fuertes son una de las causas más comunes de la pérdida de audición. ¡Si pones en práctica estos hábitos saludables ahora, puedes ayudar a proteger tu maravilloso sentido de la audición por muchas décadas más!

Un par de tapones de espuma para los oídos.

Tapones de espuma

Un par de tapones para los oídos premoldeados.

Tapones premoldeados

Orejeras que se usan para proteger la audición.

Orejeras con protección auditiva

Tapones auditivos semiaurales usan para proteger audición.

Tapones auditivos semiaurales

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